UNA IGLESIA IMPACTANDO A SU COMUNIDAD
INTRODUCCIÓN:
¿Alguna vez te preguntaste cuál debiera ser la inferencia y postura de la iglesia local ante su contexto y sociedad? ¿O si la iglesia muestra una iniciativa real e interés genuino por la agenda de su comunidad, por sus necesidades, problemáticas, injusticias, dolores, virtudes y alegrías?, ¿Te preguntas si hoy hay ministros, hombres y mujeres que anhelan y están dispuestos a conocer el día a día de su comunidad?
Había un hombre, obispo de una comunidad en Chile, el cual amaba la palabra y el evangelio, además de tener un compromiso por el prójimo, pero esta comunidad tenía serios problemas de injusticia social, lo cual creaba tensión en todos los habitantes y las autoridades. En un principio el obispo evitó entrar públicamente en los conflictos que siempre afectaban a los más vulnerables y débiles. Cansado de la situación en un momento de su ministerio empezó a alzar la voz y tomar una postura más pública ante las injusticias de su pueblo y comunidad. En muy poco tiempo comenzaron las criticas de las personas a las cuales les pedía justicia e incluso críticas de otros ministros.
En cierta ocasión, muy angustiado por la situación, desahogándose con un ministro colega le explicó todo lo que estaba pasando y cómo se sentía. Para su sorpresa este amigo le dijo que ya conocía de la situación y que lo quería felicitar, porque algunas personas del pueblo y de la comunidad que tenían en común, lo empezaron a llamar “nuestro obispo”, “nuestro párroco” y a la iglesia la llamaban “nuestra iglesia”, un término que hasta el momento nunca se le había dado, la gente comenzó a acudir a la iglesia por la manera en que este obispo se comprometió con las aflicciones de la gente. El párroco pudo orientar espiritualmente por medio del evangelio a esta comunidad que estaba sin esperanza.
Mi reflexión después de esta historia es la siguiente ¿a nuestras iglesias las llaman nuestras iglesias? y ¿a los pastores nuestros pastores?. Durante algunos años en mi paso por el instituto de teología esa fue mi pregunta y mi objeto de estudio, pero lo comprendí mucho más en mi experiencia propia al ponerlo en practica en mi iglesia local con jóvenes y universitarios cerca de la UNAM, no de la manera en que lo hizo el obispo, pero si de una manera en que nos permitiera servir, tener presencia, observar las necesidades de la comunidad estudiantil. Queríamos a través del templo proveer un espacio diferente para ellos y como iglesia reflejar el amor y los valores de Cristo.
Y justo de esto tratarán estos escritos que estaré publicando en médium. Con el fin de que reflexionemos y podamos acercarnos a las necesidades de nuestra comunidad e impactar como iglesia nuestra sociedad. Que en esta cuarentena verdaderamente nos preparemos y nos demos cuenta de que hay mucha necesidad, que en lo práctico y pastoral podamos llevar a la iglesia a convertirse en “la iglesia de la comunidad”.
Una iglesia que no existe para impactar a su comunidad no tiene razón de ser iglesia.
“La iglesia solo es iglesia cuando existe para los demás”
Dietrich Bonhoeffer
“Cómo los primeros cristianos dieron a conocer a Jesús a un mundo que aún lo ignoraba, nosotros tenemos que manifestarlo a una cultura y civilización que casi lo desconoce”
Juan María Lumbreras
Próximas publicaciones de la serie una iglesia impactando a su comunidad:
- Parte 1: Así lo hemos hecho siempre. Publicación lunes 24 de agosto.
- Parte 2: Dejando las estructuras. Publicación 7 de Sep.
- Parte 3: Los métodos y las formas si importan. Publicación Lunes 31 de Agosto.