UNA IGLESIA IMPACTANDO A SU COMUNIDAD

Jonathan Martin Orosco Medina
6 min readAug 25, 2020

--

PARTE 1: “Así lo hemos hecho siempre”

“La misión es un “éxodo” pastoral que significa salir del mundo “de uno” para ir al “mundo de otro”. Cuando más distante y diverso sea el mundo del otro en su realidad religiosa y cultural y en su realidad humana, mas exigente y radical ha de ser el éxodo de la inserción.”

Harold Segura

Uno de mis mejores amigos con el cual tengo una profunda y estrecha amistad, estuvo sirviendo por un periodo de tiempo en una pequeña misión, su trabajo era pastorear, ministrar, servir, alentar y extender el evangelio en esa pequeña región. Esta misión estaba en una comunidad a las fueras de la ciudad, la mayoría de los congregantes de ese pequeño pueblo eran personas que se dedicaban al cultivo, el campo, pequeños negocios o trabajos de mantenimiento y albañilería.

Foto de Ricardo Esquivel en Pexels

Mi amigo al estar trabajando en esa zona noto ciertas particularidades muy interesantes, la primera fue que las reuniones que se realizaban los domingos a las 10 de la mañana eran en un pequeño salón y en donde no tenían mucha asistencia, la congregación era muy inconstante, de las veinte o treinta personas que se decían miembros, asistían la mitad o menos, esto provocaba una gran angustia e insatisfacción en mi amigo. La iglesia que enviaba a mi amigo tenia muy poca cercanía con la comunidad y su postura siempre era replicar lo que se hacia en la iglesia matriz, misma liturgia y la misma dinámica de ser y hacer iglesia.

Para responder ante esta situación mi amigo ocupaba varios días de la semana para hacer visitas a las casas de las familias, la intención de estas visitas era conocer a las familias de cerca, compartir de la palabra y poder ser más intencional en su misión pastoral. Cuando mi amigo comenzó a realizar esta tarea noto un gran cambio en las vidas de las familias y los congregantes, además de comprender el porque no asistían a la iglesia los domingos a las diez de la mañana, era el único día que podían estar en su casa con su familia, descansar y retomar aliento para loa frustrante semana que les quedaba.

La primera respuesta que mi amigo obtuvo con cambiar la dinámica del modelo de hacer iglesia al visitar a las familias, fue que las personas se sensibilizaban y se abrían emocionalmente, las familias estaban dispuestas a hablar de su vida y sus problemas cotidianos, también las familias estaban abiertas a escuchar y aprender de la Palabra de Dios. Con varias semanas de implementar estas visitas, las personas invitaban a los vecinos y a otros miembros de la misma familia que antes no se congregaban y que ni siquiera pensaban congregarse, pero ahora se disponían a reunirse en las casas y participar de estas visitas pastorales.

Ahora la gente estaba dispuesta a escuchar a mi amigo en sus casas y estudiar la palabra en un lugar con más pertenencia para ellos.

Mi amigo comprendió que lo que se vivía en los cultos dominicales estaba muy alejado de su realidad, la tendencia del culto era muy formalista y de muchos protocolos, mientras que en las casas la gente estaba dispuesta a recibirle, platicar y escuchar la palabra de una manera más intima y con más responsabilidad.

En hechos tres se mencionan seis virtudes y realidades que se vivían en la iglesia primitiva:

  1. Perseveraban en las doctrinas: Lo que Lucas quería decir es que la iglesia vivía en la doctrina, no solo era del saber, el énfasis era cuanto de ella se ponía en practica.
  2. Perseveraban en la comunión: Desarrollaban un estilo de vida en donde convivían juntos. No solo es en los cultos o en las actividades si no que era un estilo de vida. Perseverar es ir más allá de lo establecido, se conocían bien unos a otros.
  3. Perseveraban en el partimiento del pan y en la oración: En este versículo está hablando de la ordenanza de la cena del señor.
  4. Señales y prodigios: Es la manifestación de Dios en un pueblo, las señales y prodigios son desde una conversión hasta una sanidad, desde una relación que se estaba dividida y después de un tiempo se reconcilia y se perdona, eso es una señal y un milagro.
  5. Tenían en común las cosas de tal forma que eran repartidas de acuerdo a la necesidad.
  6. Alabanza a Dios, había una devoción y una actitud de darle gloria a Dios, en cada una de las practicas y en cada una de las vidas de aquellas iglesias.

Aveces pensamos que para cumplir con estas seis virtudes necesitamos desarrollar el típico programa de muchas iglesias; preludio, oración inicial, lectura bíblica, cantar algún himno o una canción contemporánea, predicación, recoger las ofrendas y la oración de despedida, cada iglesia con sus propias variaciones. Pero cuando observamos la forma en que mi amigo comenzó a desarrollar el ministerio en su casa también cumplía con las seis características encontradas en Hechos:

  • ¿Perseveraban en la doctrina?: Si, a través de los estudios Bíblicos
  • ¿Perseveraban en la comunión?: Si, a través de las visitas en las casas se empezó a respirar un ambiente mucho más ameno y un estilo de vida que expresaba la unidad y el mismo sentir.
  • ¿Participaban de la cena del Señor?: Si, en las visitas la experiencia de comunidad se vivía de una manera completa, en donde el pastor celebraba este importante mandato.
  • ¿Había señales y prodigios?: Si, La manera en como las personas abrían sus corazones y sus hogares es una expresión de las señales y prodigios.
  • ¿Tenían en común todas las cosas?: Si, la dinámica de las reuniones sin duda comenzaban a tener ese compañerismo y esa cultura de unidad y del mismo objetivo.
  • ¿Había Alabanza a Dios?: Si, todas las expresiones anteriores eran una representación de esa alabanza a Dios que ya se estaba manifestando.

La excusa de muchas iglesias cuando propones o estas interesado en desarrollar nuevas formas y expresiones de hacer comunidad es “así lo hemos hecho siempre”, con ello nos damos cuenta que sus formas se vuelven normas y no herramientas.

Estas seis expresiones son muestra del evangelio en las iglesias y comunidades de fe que predican y viven a Jesús. Hoy en muchas iglesias deberían de experimentar estas virtudes de la iglesia, desear esa comunidad con la que Jesús soñaba. Hoy lamentablemente hemos abandonado estas expresiones de la iglesia, tenemos programas llenos de liturgias vacías y activismo anémico. En la iglesia de mi amigo estaba ocurriendo esto, en el templo se vivía un activismo anémico, mientras que en las casas se experimentaban virtudes neotestamentarias.

Con esta exposición podemos darnos cuenta que las formas no siempre tienen que ser las mismas para que se exprese el fundamento y las virtudes de una iglesia neotestamentaria, necesitamos tener esto en cuenta para no hostigar y obstaculizar el mover natural de Dios en las diferentes comunidades. Es muy triste que en muchas ocasiones cuando hablo con líderes juveniles y les pregunto acerca de como hacen sus reuniones, me describen una reunión exactamente como celebran sus servicios principales o dominicales, esto es muy triste porque nos dice el poco entendimiento y las implicaciones de lo que es y hace la iglesia de Jesús.

“Decía Goethe: «Cada generación tiene que escribir su propia historia.» Parafraseando, diríamos: que cada época tiene su propia visión de las bases bíblicas de la misión. Eso no quiere decir que no haya coherencia y continuidad entre las perspectivas cambiantes, sino que la manera de interpretar las bases depende del marco histórico desde el cual se ven tanto las Escrituras como la realidad que se vive”. Sidney Roid

Como cristianos muchas veces partimos del “venid y ved” pero en esta comunidad donde mi amigo pastoreaba se vivía de la manera contraria, su actitud era “ven y vere”, como iglesias cristianas tenemos la tendencia y llenamos nuestra agenda de actividades para que la gente gente venga, pero lastimosamente no estamos dispuestos a nosotros ir, no hay convicción con salir y que te conozcan, llevar el evangelio hacia afuera, queremos siempre jugar de local pero no estamos dispuestos a jugar de visitante.

--

--

Jonathan Martin Orosco Medina
Jonathan Martin Orosco Medina

Written by Jonathan Martin Orosco Medina

Conferencista, maestro, capellan y consultor para organizaciones sin fines de lucro. Especialista en proyectos y estrategias dirigidas a jóvenes.

No responses yet